Acompaña y presenta al autor Juan Carlos Mestre.
Diógenes Laercio contaba en su Vida de los filósofos ilustres que Zenón de Elea se arrancó la lengua de un mordisco, y se la escupió a la cara al tirano de la ciudad cuando este le exigió colaboración. Esa lengua rota es el símbolo desde el que Raúl Quinto diseña un mecanismo textual acerca del poder de la palabra y del precio a pagar por el decir contra el poder, con imágenes fulgurantes y a través de la puesta en valor de una memoria contrahegemónica: desde diversos activistas asesinados a oscuros episodios de la historia de España como la masacre de la carretera de Málaga o la estafa de la talidomida.
La lengua rota habla sobre la necesidad de rescatar las palabras de la boca de los monstruos: una poética no ya del silencio, sino del silenciamiento y de la rebelión, y un análisis poéticamente preciso sobre la estructura de un mundo donde son otros los que tienen el poder de nombrar y decidir qué se puede o no decir.
Raúl Quinto nació en Cartagena en 1978. Es licenciado en Historia del Arte por la Universidad de Granada y actualmente reside en Almería, donde ejerce como profesor. Es uno de los coordinadores de la Facultad de Poesía José Ángel Valente y colabora como crítico en publicaciones como Quimera. Es autor de los libros de poemas Grietas (Dauro, 2002; reeditado junto a Poemas del Cabo de Gata, La Garúa, 2007), La piel del vigilante (DVD, 2005), La flor de la tortura (Renacimiento, 2008), Ruido blanco (La Bella Varsovia, 2012) y La lengua rota (La Bella Varsovia, 2019). También ha publicado los libros de prosa híbrida Idioteca (El Gaviero, 2010), Yosotros (Caballo de Troya, 2015) e Hijo (La Bella Varsovia, 2017).
Juan Carlos Mestre nació en Villafranca del Bierzo, en 1957.Su primer poemario fue Siete poemas escritos junto a la lluvia. A éste le siguió La visita de Safo. Con su tercer poemario, Antífona del otoño en el valle del Bierzo, publicado en 1986, resultó ganador del Premio Adonáis.En 1987, durante su estancia de varios años en Chile, publicó Las páginas del fuego y, más tarde, de regreso a España, La poesía ha caído en desgracia, por el que se le otorgó en 1992 el Premio Jaime Gil de Biedma.Con La tumba de Keats, escrito y editado durante su estancia en Italia como becario de la Academia de España en Roma, fue galardonado con el Premio Jaén de poesía de 1999.