Intervienen Cristina Morano y Manuel Rico
“Miro hacia el este y no
puedo decir/que este sabor no sea incertidumbre.” En estos dos versos se dibuja la respiración de fondo
de Cambio Climático, último poemario de Cristina Morano. La autora se enfrenta
a la vida cotidiana con una mirada en la que la intimidad aparece sometida a
las sombras que gravitan sobre la vida colectiva. Con un lenguaje sencillo y
complejo a la vez y con un tono conversacional, Morano se adentra en los
espacios más próximos; un problema con el ordenador, la compra diaria, la
visión agrietada de la fiesta, la precaria compostura de los empleados al salir
de la oficina, las servidumbres que marcan la economía doméstica, el equilibrio
natural o el sentido del arte, de la literatura, de la propia poesía. (Manuel
Rico).
“Son textos de desasosiego e
incertidumbre. No sé que traerá este cambio climático, pero me consuela saber
que no viviré cuando el hombre tenga que abandonar este planeta, ya desahuciado
por los científicos, que preparan la colonización de otros planetas. Id
vosotros y destrozadlos también, yo me quedo aquí, desenchufada, con los
animales y las tormentas”. Cristina Morano