Participan Pilar Martín Gila, Carlos Oliver y el autor
Ladera umbría indaga los matices de la lengua para recuperar
el hálito de su fuerza y algo de su estremecimiento. El registro de la
vida rural y de las labores agrícolas actúa como el fondo flotante de
estos poemas.
La experiencia sencilla del mundo tamizada ligeramente por epígrafes ilustres (Machado, Lezama Lima, Padeletti, Merini, Ferrater) permite, si bien no responder la pregunta insondable («¿Qué es el tiempo?»), al menos ser hospitalario con ella.