Los personajes de La naturaleza de las gacelas están solos y
buscan asideros. Sus historias entran con frecuencia en el terreno de lo
fantástico y lo simbólico para abordar aspectos de nuestro presente. En
el relato «La naturaleza de las gacelas» un país debe optar entre
rendir su soberanía para juzgar un crimen o dejar de existir; en
«Irremplazable» se narran varias horas en la vida de una mujer
bioluminiscente; en «Naranja sangre» el quehacer cotidiano de un
laboratorio encierra ciertos secretos; en «Bolivia» el protagonista
tiene destellos de futuro que le pueden evitar problemas y vivencias; en
«Voz de voces» un empleado de la banca se instala en una casa tapiada
donde vive una pareja de ancianos; en «Asfixia» una civilización
encerrada en una semiesfera no entiende otro lenguaje que el de la
confrontación; en «Jeremías» un navegante fluvial parte a una tempestad
eterna para no consumirse en el miedo y en el frío de su villa. El
desasosiego, la inercia vital y los vínculos emocionales son los temas
predominantes de estos relatos.
Gabriel Jiménez Gómez
nació en Sevilla en 1983 y se trasladó a Madrid en 2001 para estudiar
informática; tras licenciarse comenzó a alternar su trabajo con la
escritura. Fue finalista en el II Certamen Literario Ciudad Galdós.
Participó en el taller de relatos del Patio Maravillas entre los años
2011 y 2016, durante los cuales fue fraguando los relatos que conforman La naturaleza de las gacelas.